Es una parte integral de nuestra experiencia en "Vino Para Quedarse". Este enfoque innovador ayuda a los participantes a liberar sus sentidos y a abrirse a una percepción más plena del vino. Durante las catas sensoriales, guiamos a los participantes a través de ejercicios diseñados para agudizar su sensibilidad hacia los aromas sutiles, los matices de sabor y las texturas que cada vino ofrece.

La Enología emocional no solo enriquece la experiencia del vino, sino que también cultiva una apreciación más profunda y duradera por la complejidad y la belleza de esta bebida ancestral. Así, cada cata se convierte en una oportunidad para el autodescubrimiento y la conexión emocional, tanto con el propio vino como con los demás participantes.